EMOCIÓN HASTA EL PITIDO FINAL
Los séniors se enfrentaban a uno de sus rivales directos en esta “liguilla de ocho” que se está creando en el tercio
inferior de la tabla clasificatoria. Los jugadores dirigidos por Pere Solé, Enric Papiol y Jordi Porras, mandaron en los primeros quince minutos del partido. Con un juego rápido y con buenos
desplazamientos de balón en ataque, consiguieron un 9-5 ante el experimentado Sant Andreu, plagado de ex jugadores de ligas superiores.
La segunda mitad de este primer periodo fue dominada por los visitantes que consiguieron remontar y ponerse tres goles
arriba al final de este primer tiempo. Pero para ser justos con el trabajo realizado en pista por los de Vilanova, su juego no empeoró , pero quizás se dejaron llevar por el ritmo que
quería imponer el Sant Andreu.
La segunda parte arrancó con una tónica similar, pero poco a poco los azules volvieron a correr y mover el balón de forma
que fueron imponiendo su ritmo. El trabajo tuvo se recompensa y ahora fueron ellos los que le dieron la vuelta al marcador, los últimos minutos fueron de una emoción máxima. Izan empataba el
partido a cinco segundos del final. El punto sabia a gloria después de la recuperación que el Vilanova había realizado…, pero en el saque de centro de este último un jugador local interceptó el
saque del Sant Andreu y con la nueva norma la falta implica dos minutos de exclusión y penalti.
Parecía que por un error en los últimos segundos un punto tan valioso se iba a esfumar. El lanzador de penaltis del Sant
Andreu chutó el penalti pegado al palo derecho pero un Martí “imperial” paró el lanzamiento en dos tiempos y provocó una explosión de alegría en el pabellón que hacia justicia al esfuerzo de éste
joven grupo.
Enhorabuena, equipo.